Entre las más conocidas del
mercado están: Visa, American Express, MasterCard, Diners Club, JCB, Discover,
Cabal, entre otras. Las grandes tiendas y almacenes del mundo también emiten
tarjetas de crédito para sus clientes.
Los usuarios tienen límites con
respecto a la cantidad que pueden cargar de acuerdo a la política de riesgos
existente en cada momento y a las características personales y de solvencia
económica de cada usuario. Generalmente no se requiere abonar la cantidad total
cada mes. En lugar de esto, el saldo (o "revolvente") acumula un
interés. Se puede hacer sólo un pago mínimo así como pagar intereses sobre el
saldo pendiente.
Si se paga el saldo total, no se pagan intereses.
La mayor ventaja es la
flexibilidad que le da al usuario, quien puede pagar sus saldos por completo en
su fecha límite mensual o puede pagar una parte. La tarjeta establece el pago
mínimo y determina los cargos de financiamiento para el saldo pendiente. Las
tarjetas de crédito también se pueden usar en los cajeros automáticos o en un
banco para servirse de un adelanto de efectivo, aunque a diferencia de las
tarjetas de débito, se cobra un interés por la disposición, comisión y, en algunos
países, un impuesto porque se trata de un préstamo.
Un pago con tarjeta de crédito es
un pago con dinero M1, (dinero crediticio) que como todo agregado monetario
distinto de M0, no es creado por los bancos centrales sino por los bancos
privados o las tiendas que dan créditos. Por tanto, el hacer efectivo un cobro
con tarjeta de crédito depende de la solvencia de la entidad emisora de la
tarjeta. Ese dinero crediticio NO es del tarjetahabiente, lo tiene que pagar.
Se suele cobrar una cuota anual
por el uso de la tarjeta.
Cuando se paga con tarjeta en el
comercio, el cobrador suele pedir una identificación (identificación personal,
permiso de conducir, etc. ) y exige la firma del pagaré o voucher para
acreditar que se es propietario de la tarjeta. Existen algunas excepciones
donde no se solicita firmar el recibo, a éste sistema se le denomina
"autorizado sin firma" y suele utilizarse en comercios con grandes
aglomeraciones de gente, como lo son cines, restaurantes de comida rápida y
otros lugares similares. En algunos países se solicita el ingreso de un NIP
para autorizar las compras de manera presencial.
En caso de uso fraudulento hay
que dar aviso por escrito a la entidad financiera o tienda que le da la tarjeta
pidiendo que anule el cargo y seguir los trámites de cada institución. El
emisor de la tarjeta debe demostrar que la compra ha sido hecha por el
propietario.
Las compras con tarjeta de
crédito pueden tener diversos seguros sobre el saldo financiado.
Es un número de cuenta principal
de las tarjetas de crédito y tarjetas bancarias. Tiene una cierta cantidad de
estructura interna y las cuotas de un sistema común de numeración. Los números
de tarjeta de crédito son un caso especial de la norma ISO / IEC 7812 números
de tarjetas bancarias.
Una norma ISO / IEC 7812 contiene
un número de un dígito identificador principal de la Industria (MII), uno de
seis dígitos Número de Identificación del Emisor (IIN), un número de cuenta, y
un cheque de un solo dígito calcula utilizando el algoritmo de Luhn. El MII es
considerado como parte del IIN.
El término "Emisor Número de
Identificación" (IIN) sustituye a los utilizados anteriormente
"Número de Identificación Bancaria" (BIN). Véase la norma ISO / IEC
7812 para más información
Actualmente existe un gran rango
de tecnologías disponibles para las tarjetas de crédito.
La tradicional es la de la banda magnética. No
obstante, se está extendiendo la de las tarjetas de crédito con microchip. Esta
tecnología, fue desarrollada por Roland Moreno, en la cual un circuito
electrónico integrado a la tarjeta realiza la mayor parte de los controles
relativos a su uso, ofrece más seguridad al usuario y al banco emisor: el
microchip integra dispositivos de protección electrónica que impiden su
violación o la lectura sin autorización de la información